El proyecto se enmarcó en las iniciativas sociales que desarrolla el Fondo de Fortalecimiento de
Organizaciones de Interés Público a nivel nacional y se ejecutó a través de talleres práctico-
teóricos.
Pelarco.- Mezcla de sabores, texturas, sensaciones y con los aromas de la elaboración de
productos típicos chilenos, con énfasis en la gastronomía local, así desarrollaron los
integrantes del Club de Adulto Mayor Lolosaurios de Pelarco, su proyecto social que busca
rescatar sus raíces maulinas a través de sus habilidades culinarias.
La iniciativa se llevó a cabo a través de talleres práctico-teóricos, en compañía del seremi
de Gobierno, Jorge Guzmán Zepeda y el alcalde de la comuna, Bernardo Vásquez,
proyecto que se enfocó en poner a prueba las destrezas de los adultos mayores, gracias al
financiamiento del Fondo de Fortalecimiento de Organizaciones de Interés Público (FFOIP)
del Ministerio Secretaría General de Gobierno.
Así es como el proyecto “Juntos y revueltos, queda más rico”, obtuvo gran valoración del
vocero regional de Gobierno, Jorge Guzmán Zepeda, ya que, “nuestros adultos mayores
son sinónimo de experiencia y este proyecto ayudó a que ellos, demuestren todas sus
habilidades culinarias, además, fue un espacio de dispersión para que se unan aún más
como agrupación y por qué no, también llevarlo a ser una fuente de ingreso. Así que
estamos muy contentos por el desarrollo de nuestra región, visibilizar sus bondades, la
maravillosa gastronomía que nos rodea y por supuesto de la manos de nuestros queridos
adultos mayores que sin duda, le ponen todo el amor como ingrediente principal”, señaló
la autoridad.
La instancia que los acercó e impulsó sus habilidades sociales, tuvo como objetivo
entregar independencia económica al club con productos de elaboración propia para su
distribución. Así es como dentro de los implementos a los que accedieron para desarrollar
el curso estuvieron: Elementos de sanitización (por prevención ante el Coronavirus), una
monitora, pecheras estampadas, utensilios de cocina y productos de mercadería para la
producción de las recetas. Todo esto contó con un presupuesto de cerca de un millón y
medio de pesos.
Finalmente, Edita Vega Fernández, tesorera del club, agregó que durante el proceso de
postulación e inicio de ejecución hubo cambios, ya que “teníamos visto otro proyecto que
íbamos a hacer, pero por el tema de la pandemia lo tuvimos que cambiar y postulamos a
un proyecto para hacer pan, empanadas, tortillas y postulamos a hornos semi industriales,
ollas, pecheras, sillas y varias cosas que se compraron”, señaló.
Junto a ello, señaló que como organización ha sido complejo reunirse desde marzo, pero
“estamos demasiado felices y agradecidas porque son cosas que realmente nos hacían
falta y usted sabe que para los adultos mayores a veces es muy difícil conseguir cosas,
pero gracias a esto lo hemos conseguido. Nos sentimos realizados”, concluyó.