Santiago, domingo 16 de octubre de 2016.- El dolor, entendido como una experiencia sensorial o emocional desagradable asociada a un daño real o potencial en un tejido, es reconocido como una enfermedad por la Organización Mundial de la Salud desde el año 1982, al considerarlo un problema de salud pública. En razón de ello, cada 17 de octubre se conmemora el Día Mundial Contra el Dolor, cuyo objetivo es concientizar a la población y a las autoridades sobre esta enfermedad.
Sólo en América Latina, más de 98 millones de personas sufren de dolor crónico a diario; y en Chile la cifra asciende a más de 5 millones de personas, de las cuales 1,2 millones lo sufren de manera severa, lo que trae consigo un deterioro en su estilo de vida y disminuciones evidentes en su desempeño laboral. Sin embargo, pese a lo alarmante de las cifras, en países como el nuestro no existen políticas públicas concretas que ayuden a los pacientes a sobrellevar sus tratamientos.
En Chile, el Dolor Crónico le supone un costo al Estado de más de $547 mil millones cada año, (lo que equivale al 0,32% del total del PIB), teniendo en cuenta las consecuencias tanto sanitarias (discapacidad, costes médicos, tratamientos, diagnóstico) como no sanitarias (pérdida de productividad laboral),de acuerdo a un estudio de coste y carga de la enfermedad, desarrollado por la Asociación Chilena para el Estudio del Dolor (ACHED) y la Universidad Católica.
Este estudio fue presentado recientemente en el último Congreso Mundial de Dolor realizado en Japón, con una positiva recepción de los asistentes y en el que además, se llegó a la conclusión de que el dolor crónico musculo-esquelético pasa a ser la primera causa de discapacidad en Chile.
Cabe indicar que, las patologías que más costo y carga suponen, son el lumbago que le supone al estado un costo de 174 mil millones (MM) y la osteoartritis de rodilla (148 MM), principalmente, junto con otras enfermedades como osteoartritis de cadera (46 MM), fibromialgia (31 MM), síndrome de hombro doloroso (121 MM) y dolor miofascial (25 MM).
Asimismo es de destacar que el impacto mayor de estas enfermedades se da en personas en edades productivas de la vida, entre los 20 y 50 años.
Este tipo de enfermedades son la segunda causa de licencias médicas en el país, y se refleja en que las personas que sufren de dolor tienen 20% más de días laborales inactivos en comparación con la población en general.
“El Dolor invalida mucho al paciente, le cambia la calidad de vida notoriamente ya que se despierta y se acuesta con dolor, es un paciente que sufre otras alteraciones emocionales como la depresión y alteraciones del sueño. Provoca transformaciones graves en las relaciones interpersonales debido a que es un problema que no cede”, asegura el Doctor Norberto Bilbeny, perteneciente a la ACHED.
Por su parte, el dolor severo, aquel que se establece en un nivel de intensidad máximo o cercano al máximo en la “Escalera Analgésica”, tiene un mayor impacto negativo en la población, dado que puede representar una disminución de hasta 40% en el desarrollo de sus actividades laborales (productividad) frente a la población en general.
Según el doctor Bilbeny, esta enfermedad trae consigo problemas emocionales y laborales, “Hay consecuencias que vienen de la mano al dolor, como la discapacidad y la depresión. Según los últimos estudios al respecto, el rango etario donde más se concentra este problema es en personas en plena etapa laboral (entre los 30 y 60 años)”.
Además, más del 70% de ellos declara que este padecimiento tiene un importante impacto en las actividades de su vida cotidiana y el 24,4% asegura haber tenido una licencia médica por esta causa, cifra que sube a un 30% cuando se trata de trabajadores.
Es importante señalar que las mujeres trabajadoras tienen un 44% de prevalencia del dolor frente al 34% que registran los hombres.
Gloria Santillés sufre de dolor crónico a raíz de un accidente automovilístico, que la dejó parapléjica con dolores traumáticos que son imposibles de erradicar, “El dolor es una enfermedad y lamentablemente no es muy conocida y en muchos casos los tratamientos en hospitales públicos son muy básicos. Los dolores llegan de forma muy intensa y no se van, pasan semanas y no puedo dormir. Necesitamos que esta enfermedad sea conocida por todos y reconocida por las autoridades para que nos ayuden a costear los tratamientos”.
Grünenthal Chilena, líder global en tratamiento contra el dolor, acaba de lanzar el sitio web “Siento Dolor” (www.sientodolor.cl) que permite conocer más acerca de esta enfermedad y cuenta con consejos prácticos, a cargo de destacados especialistas, para tratarla.
Fuente: Llorente & Cuenca, Comunicaciones