Con fecha 8 de abril de 2013, fue exhumado de su tumba el cuerpo de Pablo Neruda, por orden judicial con el objeto de realizar pericias técnicas que confirmaran la causa de su muerte. Han pasado más de dos años y hasta hoy sus restos permanecen insepultos a la espera de una decisión de la Corte de Apelaciones. Sin ánimo de interferir en la labor de la justicia, con la que siempre hemos colaborado, consideramos que ha pasado un tiempo más que prudencial para que el poeta vuelva a descansar en paz en su residencia en la tierra de Isla Negra.
FUNDACIÓN PABLO NERUDA