A pesar de que aún gran parte de los colaboradores no tiene una confirmación de la empresa, la mayoría lo considera uno de los bonos más importantes y espera poder gastarlo en alimentación, compras de regalos navideños y pagos de cuentas.
El fin de año se acerca, al igual que una de las festividades favoritas de las personas: la Navidad. Pese a que nuevamente se vivirá en pandemia y puede que las compras masivas y grandes reuniones familiares no se realicen como en años anteriores. Sin embargo, el ítem aguinaldo sigue siendo un tema importante para los trabajadores.
Así lo demostró una encuesta realizada por Laborum, en la que participaron casi 600 personas, y que evidenció que para el 58% de los colaboradores el aguinaldo navideño es uno de los más importantes. No obstante, a pesar de estas expectativas, el 46% cree que no lo recibirá.
Ahora bien, si las compañías presentan problemas para entregar el bono, entre las alternativas que plantean las personas para una negociación está como primera opción la entrega de un día libre, con un 43%; un 25% prefiere el recibo de un monto menor; en tercer lugar con un 21% aceptaría la entrega de alimentos para la cena navideña y un porcentaje más pequeño 7% no estaría dispuesto a aceptar ningún cambio.
Otro de los datos relevantes es que el 83% de los encuestados afirma que su organización aún no le entrega información sobre si recibirá aguinaldo o no. Sin embargo, el 53% considera que deberían entregar pronto esta información, para así planificar con tiempo los pagos o compras.
“Vamos a cumplir casi dos años de pandemia y el escenario en el mercado laboral no ha sido fácil. Pese a que en los últimos meses el desempleo ha disminuido, la situación económica del país sigue atravesando momentos difíciles. A través de este sondeo pudimos darnos cuenta que los colaboradores cuentan con el aguinaldo para fin de año, porque eso les permite organizarse con los gastos. Por eso es importante que las empresas hagan el esfuerzo de poder entregarlo o bien de avisar si se obtendrá el beneficio o no”, explica María Jesús García-Huidobro, gerente de marketing de Laborum.
Por otro lado, en el caso de recibir el bono, el 40% asegura que lo gastaría en alimentación, el 35% en regalos navideños, un 32% lo usaría para pagar cuentas, mientras que un 24% lo gastaría para las fiestas de fin de año y un 19% para ahorrarlo. Por último, un 18% lo ocuparía para compras personales, un 11% en otro ítem y un 8% en ahorro para viajes.
“Si comparamos estas cifras con el año pasado, la alimentación sigue siendo la opción más importante para los trabajadores. Sin embargo, este año la alternativa de pagar cuentas bajó un puesto en comparación al 2020, quedando en el tercer lugar de las preferencias. El ítem ahorro sigue siendo uno de los más importantes en comparación con el año pasado. Estos datos nos indican que las preferencias de los trabajadores no cambian mucho desde el comienzo de la pandemia y cómo las personas están administrando su dinero en base a sus necesidades, por lo mismo el bono es algo importante”, explica María Jesús.
En el caso de qué tipo de aguinaldo le gustaría recibir un 90% lo prefiere en dinero efectivo, seguido por gift card ( 5,9%), canasta familiar ( 3%) y finalmente el ítem otro (1,6%).
“El año pasado estas preferencias fueron las mismas, el dinero en efectivo es el más solicitado por los trabajadores porque les permite tener más libertad en qué y dónde gastarlo. Por eso, nuestro llamado a las organizaciones es hacer el esfuerzo de que sea entregado de esa forma”, explica la gerente de marketing de Laborum.
Finalmente, otras de las respuestas que llamaron la atención es que el 77% cree que su empresa no realizará celebración de fin de año para los colaboradores, pero el 54% participaría si fuera presencial, el 34% sólo si fuera virtual y a penas un 12% preferiría no asistir. Para María Jesús García-Huidobro, “esto tiene directa relación con la pandemia y las cuarentenas, ya que muchos compañeros de trabajo dejaron de verse cotidianamente ya sea por los aforos reducidos -en el caso de las personas que trabajan presencial- y por la pérdida de contacto con los colegas en el caso de las personas que llevan meses haciendo teletrabajo”.
Fuente: E-press.