El proyecto de Ley de Presupuestos 2026 eliminó todos los recursos del Fondo para el Reciclaje, dejándolo con presupuesto cero. La Dipres justificó la medida por una subejecución del 49 %, pero lo preocupante es la distancia entre los compromisos ambientales del país y la forma en que se gestiona su política circular.
El fondo nació para impulsar la reutilización, el reciclaje y la valorización energética, fortaleciendo capacidades locales y promoviendo educación ambiental. Su cierre llega justo cuando Chile debe cumplir la Ley REP, avanzar hacia la carbono neutralidad y concretar su Estrategia de Economía Circular 2040.
Seguimos midiendo avances por toneladas recolectadas, no por materiales efectivamente valorizados. No se puede exigir más reciclaje mientras se eliminan los mecanismos que lo hacen posible.
La eficiencia fiscal es necesaria, pero también la coherencia de propósito. Reciclar sin presupuesto no es austeridad: es una contradicción que debilita la transición hacia una economía verdaderamente sostenible.
Felipe Barros, gerente general de Ecológica
Fuente: Corpo.