Con una inversión regional de $281 millones, el Gobierno de Santiago inauguró equipamiento para la Fundación TACAL que beneficiará a más de 3.000 personas con discapacidad al año. El gobernador Claudio Orrego destacó que la inclusión es una prioridad de su administración, “esta ciudad la estamos construyendo con las personas al centro. Es para todos y todas, sin ningún tipo de discriminación”.
En el marco de su compromiso con una Región Metropolitana más inclusiva y equitativa, el gobernador Claudio Orrego encabezó la entrega de equipos de cocina, mobiliario, tecnología y herramientas de apoyo para la Fundación TACAL. La inversión regional alcanzó los $281.223.599, beneficiando directamente a más de 3.000 personas adultas que viven con alguna discapacidad física y/o intelectual, que cada año se capacitan en oficios de outsourcing y áreas administrativas.
El gobernador Orrego destacó que “esta ciudad la estamos construyendo con las personas al centro. Es para todos y todas, sin ningún tipo de discriminación. Y eso significa ponerse en los zapatos de todos los que ocupan la ciudad. Y eso no podemos hacerlo las autoridades solas, necesitamos fundaciones como Tacal, porque no solamente atienden o apoyan a las personas que llegan o pasan por acá, sino que también ayudan a cambiar la cultura de nuestra sociedad, por lo que estamos felices de estar acá y seguirán contando con nosotros”.
Durante la ceremonia, los asistentes pudieron conocer de primera fuente las historias de quienes se están formando en la fundación, como el caso de Digna Sepúlveda que vive con una condición física que le produce fuertes dolores y tras un semestre de capacitación en Tacal ingresó como asistente administrativa en el área de capacitación de una empresa. Ella destacó que, “no somos discapacitados, somos inclusivos. Una discapacidad no nos define, porque todos somos discapacitados en alguna área. La fundación me enseñó recursos humanos, contabilidad, uso de Excel, postventa, y eso me ha permitido trabajar”.
El gobernador resaltó que “vine acá cuando era intendente primero y dije, este lugar tenemos que abastecerlo y dotarlo. Así nació el proyecto: son casi $300 millones en equipamiento, desde cosas muy sencillas, como un mueble, una mesa, los computadores hasta la cocina, que contribuirán a una mejor capacitación laboral y también trabajar desde aquí. Una ciudad más humana tiene que ser una ciudad más inclusiva. Y eso no se hace por obra y gracia del espíritu santo. Se hace trabajando con la sociedad civil”.
La presidenta de la Fundación TACAL, Andrea Zondek, recordó los 30 años de trayectoria de la institución: “la inclusión laboral no es un gesto simbólico. Es una tarea compartida que requiere voluntad, acción y afecto. Cuando una persona encuentra un lugar donde se le valora, se le respeta y se le da la oportunidad de aportar, no solo cambia su vida: cambia también la cultura de la organización, y cambia nuestra sociedad. Gracias a este trabajo colectivo, hoy casi 3.000 personas con discapacidad cuentan con empleo formal. Y detrás de cada cifra hay un rostro, una historia, una familia que ha visto cambiar su vida”.
Fuente: Gobierno Santiago.