- Se trata de una cepa del COVID-19 que ya ha registrado casos en Latinoamérica. Epidemióloga de la UTalca explica sus características y cómo evitar contagios.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la subvariante XFG conocida popularmente como Stratus o “Frankenstein” representa el 48% de los casos de COVID-19 a nivel global hoy.
Esta nueva subvariante surge de la combinación de dos linajes diferentes del virus. “La variante Frankenstein se llama así porque viene de la unión de dos tipos de variante, haciendo alusión al monstruo creado por partes”, explicó Erika Retamal Contreras, epidemióloga y directora de Salud Pública de la Universidad de Talca.
Pese a su crecimiento en la circulación global, la experta recalcó que “es importante destacar que esta nueva variante, Stratus XFG, es parte de la cepa Ómicron, y no representa una problemática mayor en la situación epidemiológica mundial”, señaló.
En Latinoamérica se ha detectado en países como Argentina y Brasil, mientras que en Chile aún no se ha identificado oficialmente. Sin embargo, la especialista advirtió que esto no significa que no esté circulando. “No todas las personas que presentan síntomas respiratorios se hacen exámenes específicos para identificar la variante, por lo que su ausencia en los registros oficiales no implica que no esté presente”, subrayó la epidemióloga.
¿Cuáles son sus síntomas?
En cuanto a los síntomas, Retamal detalló que esta variante presenta particularidades. “Lo notorio de ésta y de su antecesora, llamada Nimbus, es que afecta principalmente la garganta, causando ronquera, afonía o disfonía. Además de esto, los síntomas habituales como fiebre y malestar general siguen presentes”, especificó.
Respecto a las medidas de prevención, la especialista recordó que las recomendaciones continúan siendo las mismas. “La vacunación sigue siendo fundamental, especialmente para personas en situación de riesgo, como adultos mayores, personas con comorbilidades y personal sanitario”.
Además, señaló la importancia del lavado de manos frecuente, el uso de mascarilla si se presentan síntomas respiratorios, toser en el antebrazo y ventilar adecuadamente los espacios cerrados.
Finalmente, Retamal tranquilizó a la población enfatizando que la OMS mantiene esta variante bajo vigilancia. “Esto significa que cualquier mutación que pueda generar un aumento en la gravedad o la transmisión será detectada y comunicada oportunamente. Por eso, es fundamental continuar con la vigilancia epidemiológica y seguir las recomendaciones sanitarias,” concluyó.
Fuente: Universidad de Talca