Con gran satisfacción, Vinos de Chile comparte los resultados de esta cosecha, que se
perfila como una de las más sobresalientes de los últimos años y que refleja el compromiso
de nuestra industria con la calidad, la diversidad y la identidad de nuestros vinos.
Santiago, 1 de agosto de 2025 – El jueves 31 de julio, la Cofradía del Mérito Vitivinícola
de Chile llevó a cabo la esperada degustación del vino nuevo, presentando 12 vinos
representativos de cuatro de las cepas más emblemáticas del país: Chardonnay, Sauvignon
Blanc, Carmenere y Cabernet Sauvignon.
La cata, que reunió a destacados profesionales del mundo del vino, confirmó lo que muchos
en la industria ya intuían: la cosecha 2025 se perfila como una de las más sobresalientes
de los últimos años, caracterizada por su frescura, concentración y notable tipicidad
varietal.
Un recorrido por los valles y su diversidad
La degustación evidenció la diversidad de terroirs que hacen de Chile un país vitivinícola
único en el mundo:
Chardonnay: Tres exponentes provenientes de Curicó, Leyda y Huasco
sorprendieron por su versatilidad. Desde frutas tropicales a perfiles minerales y
florales, estos vinos mostraron equilibrio, precisión y una energía vibrante en boca
que habla del gran potencial de estas zonas.
Sauvignon Blanc: Desde Curicó, Malleco y Lo Abarca, se presentaron vinos
vibrantes, de gran frescor y expresión aromática. Destacaron los perfiles cítricos,
herbales y florales, con bocas limpias, tensas y refrescantes que reflejan con
precisión las condiciones climáticas del año.
Carmenere: Tres vinos del corazón de Colchagua resaltaron la pureza de esta
variedad icónica, sin notas verdes y con una fruta expresiva, bocas sedosas y
envolventes. La cepa confirma su sitial como estandarte de calidad del valle.
Cabernet Sauvignon: Dos vinos del Maipo (Cordillera y Costa) y uno de
Colchagua cerraron la jornada mostrando tres expresiones contrastantes, pero
igualmente distinguidas. Desde la elegancia y frescura del Maipo, hasta la
profundidad y estructura de Colchagua, con viñas centenarias que prometen un
largo potencial de guarda.
Una cosecha para recordar
Los asistentes coincidieron en que la vendimia 2025 destaca por su calidad excepcional.
Las zonas tradicionales vieron rendimientos más bajos, lo que se tradujo en mayor
concentración, mientras que algunas zonas extremas ofrecieron volúmenes más generosos
sin sacrificar calidad.
“Los vinos blancos mostraron una combinación poco común de frescura e intensidad
aromática, mientras que los tintos impresionaron por su elegancia, equilibrio y tipicidad
varietal”, comentó uno de los asistentes. “Estamos, sin duda, ante una añada memorable”.
Chile reafirma su lugar en la élite vitivinícola mundial
Esta degustación no solo celebró la nueva cosecha sin alteraciones, con uvas sanas, sino
que también reafirmó el compromiso de la industria chilena con la excelencia, la diversidad
y la innovación. Chile continúa posicionándose como un productor de clase mundial,
capaz de ofrecer vinos de carácter único y profunda identidad, desde el extremo norte del
Huasco hasta las zonas australes de Malleco.
Fuente: Corpo.